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La Cruz Mundial de la Juventud peregrina por la Diocesis de Girona

21/06/2010

LA CRUZ DE LA JORNADA MUNDIAL DE LA JUVENTUD EN EL CENTRO GERIATRICO MARIA GAY .

Muchos de nosotros hemos oído hablar de la Cruz de las Jornadas de encuentros de los Jóvenes a nivel mundial. Fue Juan Pablo II que en el año 1984 se la regaló a los jóvenes para que a parte de presidir sus encuentros  la llevaran especialmente por los lugares de mayor dolor del mundo. Al celebrarse las JMJ en un país la Cruz hace el recorrido por las diferentes ciudades de éste.

Pues bien como al año que viene estas jornadas tienen lugar en Madrid, durante esto meses pasará por nuestro país.

La primera semana de junio la tuvimos en nuestra Diócesis, y durante los  días que permaneció estuvo por las mañanas en las escuelas y por las tardes en un hospital, un centro sociosanitario de enfermos con VIH , residencias geriátricas  y por las noches en parroquias.

Desde el Obispado se nos ofreció para que viniera a nuestro Centro y la verdad que no dudamos en aceptar  semejante oportunidad.

El día 5 de junio a las nueve y cuarto de la mañana llegaba la furgoneta que llevaba la Cruz. Salimos, la Comunidad, a acogerla con emoción e ilusión y nosotras mismas colaboramos para trasladarla hasta la Iglesia .

¡Qué solemne estaba la Cruz  colocada en el presbiterio! Impresionaba tan grande (mide tres metros y medio de alta). Y pensar que ha recorrido kilómetros y kilómetros donde  que ha sido adorada, besada por multitud de gentes de toda raza y color; esto hacia estremecerse de emoción.

Una Eucaristía ambientada con el canto, las oraciones y ofrendas apropiadas nos reunió en torno  a ella a residentes, familiares, trabajadores, amigos y comunidad. Oramos por el fruto de la JMJ y se nos pidió que orásemos por todos los jóvenes del mundo. Finalizada ésta pudimos pasar a besarla, momento emotivo para todos nosotros; las expresiones de alegría y gozo abundaban. Este recuerdo ha quedado grabado en todos y perdurará por mucho tiempo.

A eso de las tres y media vinieron a recogerla. Con nostalgia pero con gran satisfacción porque había estado entre nosotros, en nuestro Centro Geriátrico Maria Gay, nos despedíamos de esta Cruz llena de significado.

 

Hna. Cristina Redondo

Pastoral de la Salud